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Producto de las actividades laborales, el ser humano sufre un desgaste principalmente en los músculos y articulaciones a lo largo de su jornada laboral.  Un programa de prevención debe buscar priorizar la salud y bienestar de los trabajadores teniendo en cuenta las particularidades de cada actividad de trabajo.

Como un complemento de la intervención ergonómica del trabajo, proponemos medidas a desarrollar tales como: ejercicios físicos de estiramiento y/o fortalecimientos de las partes corporales más propensas a ser afectadas,  sin dejar de lado la mejora en las condiciones laborales para evitar riegos en el lugar de trabajo.

Asimismo,  se realiza una evaluación a una muestra representativa de trabajadores por  profesionales especialistas identificando las partes corporales más afectadas que permita orientar los ejercicios físicos acorde a las exigencias de la actividad laboral con un mejor uso del cuerpo.

La duración de un programa de gimnasia laboral depende del contexto de cada empresa,  procurando asegurar su sostenibilidad y que los trabajadores realicen por cuenta propia los ejercicios tanto en el centro laboral como en su hogar.